Descripción
Los nabos son una raíz comestible perteneciente a la familia de las crucíferas, al igual que el brócoli y la coliflor. Tienen una forma redondeada y su piel puede variar de color desde blanco hasta morado oscuro. La pulpa es blanca y firme, y su sabor es dulce y ligeramente picante. Los nabos son una buena fuente de fibra, vitamina C y potasio, y se pueden consumir crudos o cocidos en una variedad de platos como ensaladas, sopas, purés y guisos.
Conservación
Los nabos pueden ser conservados frescos durante aproximadamente 1 a 2 semanas, dependiendo de las condiciones de almacenamiento. Aquí te presento algunas recomendaciones para conservarlos:
- Almacenamiento en el refrigerador: los nabos se pueden almacenar en el cajón para verduras del refrigerador. Asegúrate de retirar cualquier hoja que tenga el nabo y colócalos en una bolsa de plástico perforada antes de guardarlos en el refrigerador. Esto ayudará a evitar que se humedezcan demasiado y se pudran.
- Almacenamiento en lugar fresco y oscuro: si no tienes refrigerador, los nabos se pueden almacenar en un lugar fresco y oscuro, como una despensa o un sótano fresco. Asegúrate de mantenerlos alejados de la luz y la humedad.
- Congelación: los nabos se pueden cortar en cubos o rodajas y congelar. Esto puede ser útil si tienes una gran cantidad de nabos y quieres conservarlos por un período más largo. Antes de congelarlos, blanquéalos en agua hirviendo durante unos minutos para detener la actividad enzimática y asegurarte de que duren más tiempo.
